De nuevo Guerra fría

El mundo se encuentra ante acontecimientos inéditos, la guerra en Europa que no acontecía desde 1945, con la excepción de conflictos regionales como el de Croacia en los Balcanes , Irak y la busqueda de las armas de destrucción letal, que nunca fueron encontradas, o el aniquilamiento primero Afganistán, luego Irak. Dos décadas después de los ataques terroristas del 11 de septiembre (11-S) de 2001, el presidente de Estados Unidos ha tomado dos decisiones altamente simbólicas: por una parte, la retirada de sus tropas de Afganistán y, por otra, el cese de las operaciones de combate estadounidenses en Irak. Con estas dos decisiones, Joe Biden pone fin a la llamada «guerra contra el terror» iniciada por George W. Bush. Para justificarlas, Biden afirmó que se han cumplido los principales objetivos: encontrar a Osama Bin Laden, el cerebro del 11-S, y eliminar la amenaza terrorista sobre Estados Unidos que suponía Al Qaeda en Afganistán la tensión en el medio oriente, el incremento de las amenazas contra Irán de parte de Israel y los Estados Unidos las provocaciones por ataque a las bases norteamericanas en Jordania, será que no hemos aprendido de la historia, y se abre ante nosotros la posibilidad de una nueva guerra fría, que nos mantendrá pendientes antes la contingencia de un holocausto nuclear, haremos un breve recorrido sobre inició de la confrontación entre el occidente y Rusia, antes la Unión Soviética, con una comparación con la guerra en Ucrania, que dio lugar a lo que nosotros llamaremos la primera etapa de la guerra fría.

Para que los interesados puedan seguir resumidamente los acontecimientos los dividiremos en dos bloques el primero sobre la conferencia de Yalta, y el segundo con la conferencia del Potsdam

Conferencia de Yalta

La conferencia de Yalta fue la reunión que mantuvieron antes de terminar la Segunda Guerra Mundial (del 4 al 11 de febrero de 1945) Josef Stalin, Winston Churchill y Franklin D. Roosevelt, como jefes de Gobierno de la Unión Soviética, del Reino Unido y de Estados Unidos,​ y que tuvo lugar en el antiguo Palacio Imperial de Livadia, en Yalta, península de Crimea, en las costas del Mar Negro, este palacio había sido destruido durante la guerra, por lo que Stalin mandó reconstruirlo y traer los muebles elegantes desde Moscú, iniciando los diálogos, en la inteligencia de que el ejército soviético estaba cerca de entrar a Alemania lo que finalmente lo hicieron el 2 de mayo de 1945, anteponiéndose a la llegada de las tropas aliadas.

Al inicio de la Conferencia, Stalin partía con ventaja respecto a Roosevelt y Churchill, puesto que el Ejército Rojo se encontraba muy cerca de Berlín, a solo 70 kilómetros, y ocupaba casi toda Europa Oriental. En cambio, los aliados occidentales retrasaron su avance hacia el Este tras la batalla de las Ardenas, última gran ofensiva del ejército alemán en los bosques de Bélgica, que tuvo lugar entre diciembre de 1944 y enero de 1945. La negociación se preveía el dialogo por años, después, documentos desclasificados por el gobierno soviético confirmaron esta extrema expectativa era de los soviéticos. Mientras que para Moscú era esencial mantener a sus tropas en Irán para asegurarse el acceso al petróleo, así como el reparto definitivo de Alemania, para Londres lo más importante era la cuestión polaca. Ante aquel panorama, Estados Unidos empezaba a perfilarse como el nuevo árbitro mundial, y ya se estaba planteando la creación de un organismo internacional como las Naciones Unidas. Asimismo, los estadounidenses también pensaban convencer a Stalin de que la Unión Soviética entrase en la guerra del Pacífico. Para ello se ofreció a Stalin las islas Kuriles y mantener el status quo en Mongolia Exterior, que fue aceptado por Stalin, preparando a la Unión Soviética para entrar a la guerra del océano pacífico contra Japón.

Fue la continuación de la serie de encuentros que empezaron con la conferencia de Moscú de agosto de 1942, que tuvo lugar en el Kremlin, que significa centro, en Moscú, y que continuaron con la conferencia de Casablanca, del 14 al 24 de enero de 1943, la conferencia de El Cairo, del 22 al 26 de noviembre de 1943, y con la conferencia de Teherán, entre el 28 de noviembre y el 1 de diciembre de 1943, que tuvo lugar en la embajada de la URSS, en Irán, son por lo tanto varias conferencias que prepararon el terreno para la conferencia de Yalta, como han sido varios los eventos antes de los acuerdos firmados en Minsk, antecedentes del conflicto en Ucrania.

La historia nos ha enseñado que los problemas complejos se discuten en varias etapas, debido a que los diferentes intereses tienen que ser mediados mediante concertaciones, discusiones para obtener alguno de los objetivos de los beligerantes y dejar cabida a las de los oponentes, cuando esto no se logra se tratan de imponer mediante la guerra.

Los acuerdos de Yalta fueron polémicos incluso antes del encuentro final en Potsdam. Tras la muerte de Roosevelt, (que murió en abril 12 de 1945 a los 63 años) y Churchill (primer ministro de 1940 a 1945 en su primera etapa) y Stalin (que representó a la Unión Soviética en ambas conferencias) fueron acusados de no haber aceptado un control internacional sobre los países “liberados” por la URSS. Más aún, ningún otro Gobierno fue consultado o le fueron notificadas las decisiones tomadas allí.

Decisiones de la conferencia

El acuerdo oficial estipulaba:

La declaración de la Europa liberada, es decir, que ya no necesitaban seguir en estado de guerra, permitiendo elecciones democráticas en todos los territorios liberados. (Declaración que no fue utilizada en todos los países, o por lo menos cada uno tuvo una forma diferente de democracia).

Una conferencia en abril en San Francisco para organizar las Naciones Unidas (Conferencia de San Francisco). Se concibió la idea de un Consejo de Seguridad para la ONU, y se acordó que la RSS de Ucrania y RSS de Bielorrusia tuvieran escaños independientes en la ONU. (Al final las Naciones Unidas que están en Nueva York, ha servido únicamente como foro de discursos, sin que sus decisiones seán concluyentes u operativas, es el Consejo de Seguridad con cinco naciones permanentes China, Rusia, Francia, Los Estados Unidos y Gran Bretaña, los otros miembros son elegidos por períodos determinados, pero sin derecho el veto, por lo que esos 5 países permanentes son el real poder de las Naciones Unidas.

La cuestión de los crímenes de guerra quedó pospuesta.

Las decisiones sobre las fronteras de Italia con Yugoslavia y Austria se pospusieron, así como las concernientes a las relaciones entre Yugoslavia y Bulgaria y otros temas. (Todo esto provocó reacomodos y disputas, anteriores y posteriores a la disolución de la Unión Soviética el 25 de diciembre de 1991.

Respecto a Alemania

El desarme, desmilitarización y partición de Alemania, que fue vista por las tres potencias como un «requisito para la futura paz y seguridad». Así, a diferencia de lo ocurrido tras el fin de la Primera Guerra Mundial, Alemania no mantendría un gobierno nativo, sino que se dividiría en cuatro "zonas de ocupación", una para cada aliado, que concentraría la autoridad civil y militar.

Indemnizaciones para pagar por Alemania por las «pérdidas que ha causado a las naciones aliadas en el curso de la guerra». Estas indemnizaciones podían salir de la riqueza nacional (maquinaria, barcos, participaciones en empresas alemanas, etc.), el suministro de bienes por un período a determinar, o el uso de mano de obra alemana. Estadounidenses y soviéticos acordaron una cifra de veinte mil millones de dólares de indemnización, mientras que los británicos no creyeron posible llegar a una cifra definitiva.

Se estableció que la "zona de ocupación en Alemania" otorgada a la Unión Soviética comprendería casi un tercio del país con las regiones de Turingia, Sajonia, Mecklemburgo, Brandeburgo y Antepomerania, incluyendo Berlín y sus alrededores. (En la práctica esto inició la división de Berlín, el bloque por parte de los soviéticos, el puente aéreo de miles de toneladas de los aliados, la construcción del muro de Berlín y finalmente el desarrollo de la guerra fría que duró casi 50 años.

Se acordó trasladar, entre otros, a los alemanes de Polonia, Hungría y Checoslovaquia a los terrenos de Alemania Occidental.

Durante la conferencia de Yalta, Churchill partió por las elecciones en Gran Bretaña. siendo substituido por Clemente Attlee, mientras que Franklin Roosevelt murió, por lo que fue sustituido por Henry Truman

Lo escrito y firmado por los Estados Unidos no se cumplió por lo que la Unión Soviética se retractó de enviar tropas a Japón. La China comunista de Mao Tse Tung, se consolidó militarmente con el armamento japonés dejado en China después de su retirada asentando el dominio del Partido Comunista en la China continental.

La historia se repite, se firman convenios, como en Yalta,  ahora en Minsk, con grandes compromisos acompañados de extensos protocolos, para que al final con algún pretexto, ninguna de las partes los respete o lo haga parcialmente precipitando al mundo a incesantes conflictos regionales, Camboya, Vietnam, Israel, Croacia. sin contar con los innumerables golpes de estado en América Latina o África, en los latinoamericanos siempre está presente la doctrina Monroe, América para los americanos y por lo tanto en todos ellos ha participado, propagado o producido por Los Estados Unidos, desde la revolución cubana, hasta el reciente golpe de estado en Perú.

Ucreania perderá la guerra, territorios, infaestructura y sobre todo ucranianos, miles muertos por el conflicto y otro tanto que abandonaron o abandonarán el territorio ucraniano, esta desafortunada nación ha servido como campo de batalla básicamente entre dos bloques los G/ y los G2 los primeros son Francia, Italia, Gran Bretaña, Alemania, Estados Unidos, Canadá y Japón, en este bloque está México y otras naciones dominadas por este grupo, mientras que el G2 son Rusia y China y los páises emergentes aglutinados en los BRICS, este es el verdadero conflicto geopolpitico, económico y de poderes, por que quién paga la guerra de Ucrania y a quién o quienes benefician, por lo pronto en el G/ el ganador economicamente han sido los Estados Unidos, en el otro bando Rusia.